La Garcinia mangostana, conocida mundialmente como mangostán, es una fruta tropical originaria del sudeste asiático, célebre por su sabor dulce y aromático. Sin embargo, más allá de su reputación como “la reina de las frutas”, esta especie ha captado la atención científica debido a su extraordinaria riqueza en xantonas, polifenoles, flavonoides y vitaminas, compuestos que le confieren un amplio repertorio de propiedades bioactivas.
Este artículo explora, de manera clara y detallada, las propiedades más importantes y estudiadas del mangostán, desde su potencial antioxidante hasta su uso tradicional en la medicina asiática.
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1. Propiedad antioxidante
El mangostán es una de las frutas tropicales con mayor concentración de antioxidantes naturales. Su cáscara y pulpa contienen xantonas, polifenoles y vitamina C, que actúan neutralizando los radicales libres responsables del envejecimiento celular y diversas enfermedades crónicas.
Entre las xantonas más potentes se encuentran la α-mangostina, β-mangostina y γ-mangostina, las cuales protegen las membranas celulares y el ADN del daño oxidativo.
Gracias a esto, el mangostán ayuda a fortalecer el sistema inmune, prevenir procesos inflamatorios y mantener el equilibrio general del organismo.
2. Propiedad antiinflamatoria y antimicrobiana
Los compuestos bioactivos del mangostán inhiben la producción de mediadores inflamatorios como el óxido nítrico (NO), la prostaglandina E₂ y el factor NF-κB, lo que reduce la inflamación en tejidos y articulaciones.
Además, extractos del pericarpio han mostrado actividad antimicrobiana y antifúngica frente a bacterias como Staphylococcus aureus, Escherichia coli, Pseudomonas aeruginosa y hongos del género Candida.
Por ello, en la medicina tradicional del sudeste asiático, el mangostán se usa para tratar infecciones cutáneas, heridas y afecciones digestivas de origen bacteriano.
3. Propiedad cardioprotectora
Las xantonas del mangostán ayudan a prevenir la oxidación del colesterol LDL, uno de los principales factores que contribuyen al desarrollo de la aterosclerosis.
Al mismo tiempo, mejoran la función endotelial y la elasticidad de los vasos sanguíneos, favoreciendo una mejor circulación.
Algunos estudios en animales y humanos sugieren que su consumo regular podría reducir la presión arterial y los niveles de triglicéridos, contribuyendo a mantener un corazón saludable y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
4. Propiedad antitumoral
Diversas investigaciones científicas han demostrado que las xantonas del mangostán pueden inhibir la proliferación de células cancerígenas y promover la apoptosis (muerte celular programada) en líneas celulares de cáncer de mama, colon, hígado, próstata y piel.
La α-mangostina, en particular, actúa sobre rutas metabólicas relacionadas con la inflamación y el crecimiento celular, sin dañar las células sanas.
Aunque los resultados son prometedores, todavía se requieren ensayos clínicos en humanos para confirmar su eficacia terapéutica como agente antitumoral natural.
5. Propiedad inmunomoduladora y digestiva
El mangostán fortalece el sistema inmunológico gracias a su combinación de xantonas, vitaminas (como la C y algunas del complejo B) y minerales.
Estos compuestos estimulan la producción de linfocitos y mejoran la respuesta del cuerpo frente a patógenos.
En la medicina tradicional, la pulpa y el jugo se utilizan para aliviar problemas digestivos como la diarrea, la inflamación intestinal o el dolor estomacal, ya que actúan como antiinflamatorios y astringentes naturales.
Además, su efecto refrescante ayuda a mantener la hidratación y el equilibrio del sistema digestivo.
6. Propiedad antienvejecimiento
Gracias a su alta carga de antioxidantes y compuestos fenólicos, el mangostán combate el estrés oxidativo, una de las principales causas del envejecimiento prematuro.
Las xantonas neutralizan el daño celular producido por la radiación solar y la contaminación, ayudando a mantener una piel firme y luminosa.
Asimismo, estimulan la regeneración de tejidos y la síntesis de colágeno, mejorando la elasticidad de la piel.
Por ello, el extracto de mangostán es ampliamente utilizado en la industria cosmética y nutracéutica, tanto en suplementos como en cremas antiedad
7. Propiedad neuroprotectora
Las xantonas, en especial la α-mangostina, han mostrado efectos neuroprotectores al reducir la inflamación en las células nerviosas y disminuir el estrés oxidativo en el cerebro.
Esto sugiere un potencial para prevenir el deterioro cognitivo y ayudar en enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson.
Además, estudios preliminares indican que puede mejorar la memoria y la concentración, al optimizar la función mitocondrial en las neuronas.
Aunque los ensayos clínicos aún son limitados, el mangostán se considera un neuroalimento prometedor.
8. Propiedad antidiabética
El mangostán posee compuestos bioactivos que ayudan a reducir la glucosa en sangre y a mejorar la sensibilidad a la insulina.
Investigaciones en modelos animales han mostrado que la α-mangostina inhibe enzimas digestivas como la α-glucosidasa, lo que disminuye la absorción de azúcares después de las comidas.
Además, su efecto antioxidante protege al páncreas del daño oxidativo, preservando las células beta que producen insulina.
Por eso, se estudia como un coadyuvante natural en el manejo de la diabetes tipo 2,
9. Propiedad hepatoprotectora
El extracto del mangostán tiene una notable capacidad hepatoprotectora, es decir, protege al hígado de daños causados por sustancias tóxicas o estrés oxidativo.
Sus xantonas y flavonoides actúan como antioxidantes hepáticos, reduciendo la acumulación de lípidos en el hígado y estimulando la regeneración celular.
También puede inhibir la formación de radicales libres generados por fármacos hepatotóxicos, como el paracetamol o el alcohol.
Esto lo convierte en un aliado natural para mantener la salud hepática y el equilibrio metabólico.
10. Propiedad cicatrizante y dermatológica
Tradicionalmente, en países del sudeste asiático como Tailandia y Malasia, la cáscara seca del mangostán se utiliza triturada y mezclada con agua o aceite como cataplasma para tratar heridas, abscesos, eccemas y úlceras cutáneas.
Sus compuestos antimicrobianos (principalmente garcinonas y xantonas) ayudan a eliminar bacterias y prevenir infecciones, mientras que los taninos actúan como astringentes naturales, favoreciendo la cicatrización.
Hoy en día, algunos laboratorios dermatológicos exploran su uso en cremas y geles para piel sensible o con acné.
11. Propiedad antiparasitaria y antifúngica
En la medicina tradicional de Indonesia, Filipinas y Tailandia, la cáscara del mangostán se usa como remedio natural contra parásitos intestinales, infecciones por hongos (Candida albicans) y problemas bucales.
Los extractos metanólicos del pericarpio han demostrado actividad antifúngica y antiparasitaria, probablemente por la acción combinada de xantonas y taninos.
Además, se usa como enjuague para tratar aftas o inflamaciones bucales, gracias a sus efectos antiinflamatorios locales y antimicrobianos.
La Garcinia mangostana es mucho más que una fruta exótica: es una especie con un conjunto extraordinario de propiedades medicinales respaldadas por estudios modernos y usos tradicionales milenarios.
Su perfil bioactivo la convierte en un recurso botánico valioso para la salud integral.
En la actualidad, sigue siendo una de las plantas más prometedoras dentro del campo de la fitomedicina tropical.
